Una película de la directora Kathryn Bigelow, en ella se cuenta la historia de Detroit, una historia basada en unos acontecimientos reales ocurridos durante el verano de 1967 en la ciudad de Detroit en Estados Unidos. Se produjeron una serie de revueltas debido a la situación tan delicada que vivía la ciudad causada por el racismo extremo que habitaba en ella, lo que conllevó a la acción de saqueos, cometer incendios de manera intencionada y múltiples disparos por la mayoría de barrios.
Con el toque de queda impuesto sobre la sociedad, una noche la policía desalojó un bar en altas horas de la madrugada mediante una redad por vender alcohol sin tener licencia, se detuvieron a todas las personas que estaban dentro del bar, lo que causó posteriormente el comienzo de la movilización por parte de la raza negra en contra de la policía y de los abusos que estos cometían. A medida que pasaban las horas, Detroit se convertía en unos de los capítulos con más disturbios civiles con más violencia de la historia del país, con una duración de cinco días.
Se acudió a la Guardia Nacional del ejército de Míchigan para combatir el caos que se apoderaba de la ciudad, el resultado final fueron cuarenta y tres muertos, más de mil heridos, entre siete mil y ocho mil detenidos, dejando la ciudad con más de dos mil edificios plenamente destruidos.
No obstante, el estallido moral y la aberración de esta historia es cuando matan a tres jóvenes inocentes en un motel, llamados Aubrey, Larry y Cooper, todo ello debido a que la policía creía que había un francotirador pero en lugar de ello solo había una pistola de fogueo. Desde el comienzo de la película se puede ver todo el racismo que existe y de cómo eso hace que influya en el proceso de interrogación, la existencia de una supremacía policial frente a los jóvenes, con humillaciones, jugando con el medio a través de la tortura, finalmente el miedo sin darse cuenta fue lo que llevó a los policías a cometer esas atrocidades, sin olvidar el machismo y la violencia ejercida sobre Julie y Karen, las dos chicas que estaban junto los demás chicos en el motel. Cabe resaltar el como los policías les reprochan el cómo pueden estar con personas de raza negra, sintiéndose ofendidos e insultados por el hecho de estar en una misma habitación con ese tipo de personas, comentarios que afirman además el acoso y la violencia que tiene que soportar la mujer.
Hemos leído algunas críticas acerca de la industria del cine, de como pretenden pasar página con estas películas, pero en muchos medios o más bien dicho muchos críticos y expertos en estos temas, admiran el trabajo de Hollywood por plasmar estos relatos en el cine, pero resulta ser un poco engañoso, como por ejemplo que el policía negro está puesto a propósito en la película para que quizás se pueda pensar que existían policías negros dentro del cuerpo cuando en realidad no fue hasta en la década de los noventa cuando había un 2% de negros dentro del cuerpo en todo el país, y esta historia ocurrió exactamente dieciocho años atrás.
A la conclusión que queremos llegar, es que el policía de la película conocido como Melvin no es casualidad. A día de hoy, seguramente se hayan mejorado muchas cosas y logrado situaciones que ahora no ocurren como en anterioridad, pero eso no quiere decir que se haya logrado una igualdad y un respeto hacía las personas negras y afroamericanas en Estado Unidos, debido a que en estos últimos años se ha podido observar como siguen sucediendo numerosos delitos por parte de la policía a esta comunidad.
Comentarios
Publicar un comentario